sábado, 16 de octubre de 2010

Los 33

Nada de lo que ha pasado va a servir. Todo lo relacionado con los 33 será otra anécdota de la historia, como tanta anécdota del desierto, olvidada por inútil.
El desierto es el desierto, un lugar sin vida y abandonado. Vivir y trabajar en el desierto es predicar en el desierto, ahí donde lo hizo Jesús, una pérdida de tiempo, de vidas, de provecho. (Para ahorrar distracciones diré que Jesús fue un fracaso, que la iglesia que lleva su nombre es la de Judas. No te has preguntado, por qué si tienes los mismos valores de Jesús, ¿no has terminado como Él?)
Las cosas son útiles cuando sirven. Las cosas sirven cuando producen un cambio.
Esto de los 33 no cambiará nada ninguna cuestión. Cambiarán algunas leyes, descubriremos nuevas trampas, pero no nos hará más humanos.
¿Por qué lo sé? Al leer cada columna de opinión, he leído a casi todos los opinantes, todos hacen lo mismo: consolidar sus creencias. El acomplejado habla de “esfuerzo mundial”, el tres del eneagrama habla de héroes existentes, etc. Cada columnista se retrata. Mientras más leo a los columnistas, más quiero a mi diccionario.
Esto de los 33 sirvió para algo inútil: reforzar creencias.
No hay en este acontecimiento de fama mundial ninguna lección que sacar. Quizá esa sea la lección: no necesitamos lecciones para ser mejores personas.
Si necesitamos de la tortura de otros para tomar conciencia, nos parecemos a esos que torturan para sacar información.
Las lecciones que da la vida sólo sirven y son útiles cuando producen un cambio de paradigma, un cambio de creencias. Si no hay cambio, no hay lección.
Maldito acontecimiento, nos consolidó como lo que somos: unos virus que maman. Todo lo que nos consolida es un veneno, un opio.
Para mí ha tenido una utilidad: me ha servido de descarga emocional, he llorado todas mis penas acumuladas, ahora puedo acumular penas hasta la próxima inutilidad: la teletón.
(Por supuesto que yo con este escrito estoy consolidando mis creencias. De lo que aquí escribo, es de lo que hablo y de lo que vivo.)

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